De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria. De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria.
| De la serie Personajes Ilustres de la Fórmula 1: | |||
| Flavio Briatore | |||
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| Nacionalidad: |  Italianni
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| Profesión: | Ex jefe del equipo Penault | ||
| Papel en la F1: | Playboy oficial de la F1 | ||
| ¿Malo o bueno? | Es cojonudo, pero vigila a tu novia/mujer si está cerca | ||
| Logros en la F1: | Fichar a Chumajer y a Puto Amo | ||
| Crímenes que se le atribuyen: | Llevarse todas las | ||
| Su especialidad: | Ligarse a todas las tías del paddock que encuentre | ||
| Notas | Fiel a su estilo, se ha casado con una tía buenísima | ||
«La verdad es que la Fórmula 1 se ve muy bien por la tele, muy tranquilo. Y las carreras son divertidas. Bueno, cuando llueve porque si no son una mierda (suelta una carcajada)»
~ Briatore después de marcharse de la F1
Conocido empresario, playboy y filósofo italiano, es más conocido por sus conquistas y los récords de diferencia de edad entre los dos componentes de una pareja que ha batido a lo largo de su segunda vida (de la primera tenemos muy pocos datos, ya que Nerón, enfadado porque se había acostado con una de sus sobrinas, intentó quemarle el carruaje de gala, y la consecuencia de tales actos ya la conocemos todos).
Flavio Briatore, conocido en su anterior vida como Flavius Briatus, nació en una fecha indeterminada en la ciudad romana de Fetuchina Augusta. Su hermano gemelo es Eduard Punset. Ya de pequeño cultivó una gran pasión por las carreras. Estudió con el famoso filósofo griego Mouzaka, y pronto empezó a aplicar la filosofía de su maestro a la vida de todos los días. Como su pasión era más fuerte que su razón, y decidió construir un carro de competición, para probarlo en el Gran Circo de Roma ante el Emperador Julio César. Allí demostró que sus carros quizás no eran los más rápidos, pero sí los más robustos y duraderos. Descubrió a grandes talentos como Ben Hur o Canal Plus, que fueron los mejores de sus épocas.
Los años pasaban, pero Briatus no envejecía. Tras cumplir los 65 años de edad, su cuerpo dejó de envejecer, y vio que su maduez y éxitos, así como sus sestercios, eran de gran atactivo para las mozas de todos los países, así que empezó a cultivar su segunda pasión: la seducción de mozas menores de 30 años. Esto le costó muchos dolores de cabeza, sobre todo cuando el Emperador Nerón, enfadado porque se lo montaba con su sobrina la decimosexta en el granero del Coliseo, decidió perder fuego a los carros ganadores de Briatus. Desde ese día, y hasta principios del sijlo XX, no se tuvo noticias de Briatus.
No se sabe exactamente qué pasó, pero a principios del sijlo XX, un tal Flavio Briatore, que resultaba ser idéntico a Briatus, se hizo famoso durante las dos guerras mundiales por la fabicación de carros de combate. En realidad, lo hizo para ganarse la vida, sacar un poco de dinero, y dedicarse más adelante a sus dos pasiones ya mencionadas. Tras varias guerras y varias decenas de muchachas, Flavio, como ahora se hacía llamar, decidió que tocaba ponerse a trabajar en serio. Para ello decidió hacerlo en el mundo del deporte, como instructor de esquí y en sus ratos libres como jefe de Karlos Arguiñano en la gerencia de un restaurante. A principios de los años 1970 trabajó en la bolsa de Italia (se encargaba de tunear las bolsas de papel que se usaban para transportar las famosas corbatas de seda italianas, y los vestidos de las top model que luego se ligaba); en esa época conoció a Luciano Benetton, fundador de la empresa de vestimenta Benetton (sí, la de las tiendas esas que por una camiseta con escrito Benetton hecha por una niña en Nepal te cobran veinticatorce lerus y tres riñones), que lo contrató para que le hiciera las bolsas para sus tiendas. A partir de ahí, se hicieron muy amigos y más adelante socios de negocios, al abrir Benetton sus primeras cuatro tiendas en los Estados Unidos en 1979, y necesitar a alguien que supiera al menos esperanto o klingon.
Debido a sus políticas agresivas para establecer y otorgar franquicias (sobre todo gracias a la implantación del teto y otras técnicas avanzadas de selección), la cadena logró un crecimiento impresionante logrando gran popularidad. En 1989, ya habían ochocientas tiendas en los Estados Unidos, convirtiendo a Briatore en una persona económicamente bien acomodada (si contamos que se ligaba en media a 4,3 mujeres por tienda, sale a ... demasiados dedos para contar tantas mujeres... mejor lo dejamos para otro día, anda). El número de tiendas finalmente se estabilizó en doscientas lo que hizo perder a Briatore el interés por ese negocio, al no poder ligar en más de tres tiendas contemporáneamente. Así que le dijo a su amigo Luciano que se comprara uno de esos coches llamados Fórmula 1, que esos daban éxito asegurado con las neniiiiiiiiiiitas.
Luciano, que era duro de oído, entendió mal y en un alarde de huevos bien puestos, compró un equipo entero, en vez de un coche, al que llamó Benetton Formula, y puso a Flavio de semi-jefazo casi-autoritario (es decir, de segundo tras él mismo). Rápidamente renovó el personal del equipo, y lograron contratar al joven piloto Michael Schumacher, un niño teutón que tenía miedo del acelerador. Gracias a los sabios consejos de Flavio, Schumacher logró ganar una carrera en 1992 y empezó a pillarle el gustillo a la estrategia italiana al año siguiente, ganando otra carrera, para luego convertirse en lo que conocemos. Y como la envidia es mala, Michael, siempre a la sombra del gran Flavio, acabó yéndose a otro equipo en el que fuera más importante que sus jefes.
Esto le dolió mucho a Flavio, que tras varios chanchullos de los que él era un experto, se hizo presente (bajo múltiples identidades) en 11 escuderías de Fórmula 1 al mismo tiempo. Benetton, al ver lo que pasaba, decide echar a Flavio (teóricamente por reducción de plantilla, en realidad porque a Luciano le gustaba una tan Naomi Campbell y fue Flavio el que acabó en la cama con ella).
En el año 2000, la hija del mayor accionista de Renault convence a su padre para que compre el equipo Benetton y Briatore es nombrado director general. Dos meses después, Flavio deja a esta muchacha para volver con su Naomi (coincidencias, según Jiménez Losantos).
Sus últimos grandes éxitos llegaron en las temporadas 2005 y 2006, consiguiendo 2 títulos mundiales consecutivos de escuderías y pilotos con Frenando Alonso. En realidad, el piloto titular tendría que haber sido Farruquito, pero una conspiración judeo-masónica-karlista-turolense hicieron que éste acabara en prisión, por lo que tuvo que tirar de Fernando mientras encontraba a otro piloto con el espíritu y la marcha de "Farru", que es como lo llama cariñosamente. Eso sí, de nuevo, el niño (Fernando, porque "Farru" no le haría daño a nadie cuando no conduce) le pegó la puñalada a su mentor, y el pobre Flavio intentó buscar a un buen sustituto, pero Kovalainen no aguanta las sesiones preparatorias (que se realizan en el famoso Club de Alterne de la zona durante al menos una semana antes de la carrera en cuestión para que sus pilotos puedan correr bien) y a Fisichella su esposa le tiene prohibidas dichas sesiones. Flavio consiguió recuperar a Alonso después de que McLaten favoreciera a su compañero Lewis Hamilton, pero el equipo no consiguió volver a la senda de los éxitos. A finales de la temporada 2009, Briatore deja de ser el jefe del equipo Penault por el "caso Piquet" de Singapur, siendo sustituido por Eric Boullier. Briatore fue sancionado con la inhabilitación de toda actividad relacionada con la F1 como sanción por obligar a su ex piloto a tener un accidente para favorecer a Frenando Alonso. Sin embargo, Briatore luchó para que la sentencia fuera anulada, lográndolo finalmente. Es más, ya ha decarado que volverá en 2012, aunque no dirigiendo a una escudería.
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